Vivimos en una sociedad en la que no tenemos minutos para encontrarnos a nosotros mismos, una sociedad en la no se nos permite fluir, si no seguir un ritmo decadente y acelerado Una sociedad en la que los únicos locos son los cuerdos ya que son los que siguen a un sistema lleno de sombras .Parte de esta locura es enamorarse en estos tiempos, no tan buenos para los soñadores, en la que nos queremos de a ratos y pensamos que es para siempre. Locura es soñar aún en este mundo que no sabes si mañana vas a existir. Locura es tomarnos la vida en serio.
La vida muchas veces nos agarra de sorpresa y nos lleva a realizar hecho indebidos, nos dejamos llevar, fluimos incesantemente, pero luego…cuando miras atrás te das cuenta de que si no te hubieras equivocado, tropezado, vivido no tendrías toda la experiencia y el aprendizaje que tienes ahora. Definitivamente hoy no soy la de ayer porque cada hecho que ocurrió en mi vida me caló de tal manera que movió cada fibra de mi ser, gracias a eso aprendí y sobre todo viví, ya aprendí la lección que tenía que aprender. La vida no es llegar al éxito o a la cima final, sino simplemente pasar las pruebas que nos toca para así ir creciendo.
La vida es un juego, que muchos piensan haber ganado porque
tienen tal o cual nombre, tal o cual apellido tal o cual posición sin pensar
que de repente en su verdadera esencia, en si están viviendo de verdad o
solamente están cumpliendo un rol perfecto en esta sociedad. Muchos no jugamos
por quedarnos ahí, en nuestra zona de confort donde nos hayamos cómodos y tranquilos
pero de la que nos da miedo salir porque no queremos perder ese statu quo, esa posición
en la que ya nos instalamos y estamos acostumbrados a ella. ¿Por qué no nos
atrevemos a jugar? ¿Por qué no nos atrevemos saltar, a arriesgamos a hacer lo
que realmente, nos gusta, nos apasiona y nos llena? ¿Por qué tenemos tanto
miedo? Porque no queremos que nos llamen locos, tenemos miedo ser diferentes y
ser juzgados y que de esta manera nos puedan ver raro porque no cabemos en el
molde que nos implanta el sistema.
Cuando nos acordamos de niños, nos extrañamos a nosotros
mismos, extrañamos esa hermosa época de nuestra infancia . Donde no nos daba miedo
que nos juzguen, no nos daba miedo ser libres, solo jugamos vivíamos confiábamos,
éramos nosotros mismos sin preocupación la preocupación del mañana. Pero dime acaso…
¿Por preocuparnos por que vaya a suceder mañana van a cambiar las cosas o solo
dejaremos de vivir y seguir perdiéndonos cosas que tal vez nos arrepintamos
cuando seamos viejos? ¿Por que adoptamos poses? De niño adoptábamos poses, en
los juegos, roles pero ahora adoptamos poses en las que nos quedamos pegados.
“La vida es sueño y los sueños
sueños son” termino con este verso de Calderón de la Barca, tan real. Arriesguémonos,
nadie tiene la vida comprada. Te animo a que vayas corriendo y llames a ese
chico, pidas perdón, viajes, rompas la dieta. Pero vive por favor vive que no
sabes si el mañana existirá o si tal vez en una hora seguirás existiendo.
Abraza, abraza mucho, olvida los rencores, llama a esa persona con la que estas
peleada por tu puto orgullo porque la cago lo sé y duele pero te cagas por él y
quisieras mirarlo por última vez y hacerle el amor y fácil si, mandarlo a la
mierda porque se pasó de huevón, pero todavía ambos existen.