Si pudieramos detener el tiempo dejaría que los versos salgan de mi pecho. Te diria que la cobardia no es asunto de amantes.....confiaría en el universo y dejaría que las estrellas guiran mi camino hacia la luz celestial de tu ser. Tal vez detendría la ironia del reloj, para abrirme el pecho delicadamente sin apuros y no quedar naufragando en un lago de incertidumbre.Dejamos que la prisa se conjugaran con la pasión devorando nuestro fuego a tal punto de aturdirlo ....si pudiera detener el tiempo, volvería a tu sonrisa junto con la mía....a aquella sonrisa que nos decía "Vamos estoy para ti confia", "Vamos aceptemonos como somos porque somos humanos" "Vamos arriesguemonos y juguemos a equivocarnos".
Nos dejamos arrastrar por esa nube de pasión, de cenizas, de sexo que se volvieron lágrimas. Lágrimas intensas que se acorralan en nuestro pecho queriendo gritar no te vayas. Juguemos a volver en el tiempo, juguemos a querernos con las miles de historias que tenemos que contarnos todavía. Despertemos esa niñez tan tuya y tan mía, despertemos el juego, bajemos las defensas y amemonos como bien lo sabemos hacer.
Acurrucate en mi pecho y déjame calmar tus heridas, dejemos que el viento nos limpie para volver a nacer, dejemos que el aire respire en nuestros oídos los pasos que debemos seguir para caminar por la vida con la liviandad de una pluma, sin el pesar que ahora nos mata.....Para poder entender la lógica de nuestro amor, para querernos bonito, para matar las defensas.
El agua limpia, limpia el fuego y dicen que si aquel fuego se volvio oscuro necesita reposar y dejar que nazca solo. Así como en la montaña el aire dirige el fuego, el tiempo dirige las llamas que habitan en nuestros pechos. Es hora de dejar maullar ese fuego que habita en nuestros pechos, un fuego por ahora herido fuego que grita ser consolado. Pasa que aún creemos.....creemos en esas sonrisas....en esas miradas que nos regalabamos haciendo el amor, esos abrazos que brindaban luz a nuestros dias.
Dejame sentirme rodeada por tus flores, por tu dulzura, encendamos nuevamente el sueño de lo que alguna vez tuvimos. Creamos de nuevo que aún hay magia